El nombre de Jorge Rial, entre los hallazgos del Tribunal de Cuenta en la auditoría a la municipalidad de El Calafate
El Tribunal de Cuentas realizó, a fin de 2018, una Auditoría/Inspección Contable-Administrativa en la Municipalidad de El Calafate, donde se encontraron falencias en el sistema informático utilizado para el cómputo de las compras.
El sistema emite las Órdenes de pago sin ningún tipo de numeración y los empleados les colocan “a mano” un sello del día, lo cual puede dar lugar a duplicación de la numeración de dichas órdenes y alteración de la correlatividad cronológica de las mismas.
Además, el Acta de Recepción de Bienes las hace el mismo funcionario encargado de llevar adelante el proceso de adquisición, lo que impide un doble control en las compras, dado que de esta manera solo una persona compra y recibe lo que adquiere, sin intervención del sector que debe registrar la misma.
El municipio de El Calafate, a pesar de haber sido advertido en el año 2014 por el mismo Tribunal de Cuentas sobre estas irregularidades que se debían subsanar, aún en el 2018 incumplió el procedimiento contable de foliar las Actuaciones para evitar adulteraciones en el proceso administrativo de compras, bienes, patrimonio, servicios, etc. Esto va encadenado con la falta de copia de los convenios suscriptos por la municipalidad con otros organismos del Estado ni las declaraciones juradas donde se indica el motivo de su inexistencia.
Contrataciones
Con respecto a los gastos de “Publicidad”, el Tribunal de Cuentas determinó que a pesar de las observaciones realizadas en la auditoría del año 2014, Javier Belloni sigue sin tener el soporte físico y/o magnético de las publicidades contratadas, impidiendo con ello verificar que el acto administrativo se haya cumplido y el servicio se haya brindado.
Los auditores solicitaron las constancias que no pudieron tener disponibles durante la inspección, pues no tuvieron en sus manos la documentación que acredite el contenido institucional de la publicidad abonada. Así, no se pudo constatar la justificación de cada contratación y no se acreditó que el precio abonado por dichos servicios estén de acuerdo al precio de plaza para idénticas situaciones.
- Entre lo contratos observados figura la suma de $ 4.136.148,98, en los siguientes conceptos:
- 26/06/18 a Cooperativa de Trabajo Periodística la suma de $ 7.000,00
- 26/06/18 a Fm Dimensión, la suma de $ 10.000,00
- 26/06/18 a Pérez Luque Guillermo, un total de $ 10.000,00
- 26/06/18 a Villegas Sergio por $ 20.000,00
- 05/02/18 a Jorge Rial (Orden de pago 57878) un pago de $ 1.210.000,00
- 21/02/18 a Lucas Brigando (OP 5799) $ 166.000,00 (contrato por 9 meses)
- 09/08/18 a Team Media SA (OP 59619) por $ 535.956,00 (Cont. por 10 meses)
- 12/06/18 a Team Media SA (OP 59104) por $ 1.001.671,00 (Cont. por 10 meses)
- 05/07/18 a Team media SA (OP 59305) $ 1.175.521,98 (Contrato por 6 meses)
La Auditoría halló además desdoblamientos de Ordenes de Compras y el incumplimiento al Reglamento de Contrataciones: al parecer, el municipio de El Calafate no realiza el procedimiento de contrataciones a través de Concurso de Precios o Licitación, como marca la ley
I believe I can fly
La Fiesta del Lago del año 2018 dio, por alguna razón, la excusa para la compra de muchos pasajes con fondos públicos: el Intendente autorizó la erogación de $ 6.669.351,30 por un total de 27 pasajes aéreos de los cuales el municipio no dejó registros de quién cómo y cuándo fueron usados, como manda el reglamento contable, generando la sospecha de que parte de ese dinero, podría haber ido a parar a gastos no declarados o a personas sin vinculaciones con el funcionamiento municipal, que se cargan con el pretexto de realizar el pago a los artistas que contrató la comuna para el evento.

Las 27 Ordenes de Pagos carecen del correspondiente tickets y del instrumento legal donde se autoriza el gasto, la comisión de servicio realizada y el detalle y nombre de cada persona que realizó la inversión.
Desde la intendencia de El Calafate, ante esta observación, argumentaron que “ellos no pueden exigirle a los artistas la rendición de los tickets de vuelo”. Los auditores le señalaron al Intendente Belloni que, si bien es cierto, eso no es suficiente para explicar la falta de apego a la ley de contabilidad, toda vez que debe ser el propio gobierno municipal quien debe arbitrar los medios necesarios y suficientes para poder justificar y acreditar cada uno de los otorgamientos de pasajes.
El Intendente invirtió den la Fiesta del Lago casi 7 millones de pesos, generando Ordenes de Pago que contablemente las consignó bajo el rubro “Funcionamiento” y/o “Ente mixto”, sin ninguna especificación del gasto, lo que se considera una irregularidad y deja en el aire una velada sospecha de malversación de fondos públicos.